QUEIMADA (1969).

Film extraño sobre el colonialismo, estipulado de sesión 'CINE-club' por ser CINE EUROPEO y al aparecer Marlon Brando, está repescada de era del 'Cult-Movie' de los AÑOS 70. Crítica descarada al imperialismo y racismo de otros tiempos en nuevas tierras descubiertas, su realización apelmazada algo atávica, hoy desestimada, solo es una película que fue lo que no fue. De libre elección.

Los AÑOS 60 y 70 fueron una buena prueba de que el CINE producido en Europa podía llegar lejos en sus fronteras, al margen de tener éxito o de una calidad variada, un aspecto muy analizado y puesto en una mirada plena de dudas, muchas muestras europeas se consagraron como un CINE a tener una admiración especial.  

El CINE italiano, en general, había hecho su marca con el Neorralismo después de 'La 2 Guerra Mundial (1939-1946),  directores enclavados en el MELODRAMA o el trágico DRAMA íntimo y otros más destinados a otros destinos, alzarón su filmografia teniendo cierta repercusión internacionalmente.



Así, "Queimada¡" (1969) se estrenó, siendo una propuesta sobre la tiranía, la locura y el despropósito inquisidor del colonialismo teniendo un recorrido mas reconocido después de su estreno más allá los AÑOS 70.

Ayudados con financiación francesa, "Queimada¡" (1969) tiene un conocimiento entre cinéfilos y entendidos en CINE, de repartición y valoración muy diferentes y variada, es de todos modos, una película altamente reconocida.



Si, por ejemplo, todo un artista norteamericana como Marlon Brando estuviese en una pelicular, el éxito estaba asegurado, su actuación brillante y bien retratada era un llamamiento sin duda alguna, cuestión que el colosal actor causa que su afección particular de carácter le llevará a trabajar en producciones europeas durante los AÑOS 70, ganado con eso todavía más prestigio.

Su interpretación en "Queimada¡" (1969) es ambigua y a discrepar, representa el lado visitante a isla ficticia en las Antillas del Caribe repleta de 'negros criollos' para un fin malicioso durante el siglo XVIII para generar una determinada rebelión con los nativos y esclavos, únicamente para interés británico, utilizando mano dura mercenaria con un caudillo, la libertad acallada y oculta, dará rienda suelta.... 

Marlon Brando, posteriormente partidario en la defensa de los indios norteamericanos nativos en la vida real durante todos los AÑOS 70, pudo marcarle este film apreciable para aquella época, aclamado por la crítica y vuelto a estrenarse en siguientes temporadas anuales en pequeños cines de clasificación 'Arte y Ensayo', que al paso del tiempo han dejado el máster original algo de mella, no estando demasiado rendible para los días de hoy en día.


En opinión propia del propio Marlon Brando, declaró, que su interpretación fue 'la mejor actuación que había hecho' (muy discutible, realmente -snip¡-) durante una entrevista con Larry King de la CNN, sin ser vislumbrada su explicación, no estando razonada... evidentemente, si no fuese por las circunstancias del momento, eran horas de protesta en los EE.UU. en aquellos AÑOS 60, y algo más de obstinación propia, sus intervenciones en otras películas le dan una afirmación a la evidencia.

A la dirección estuvo Gillo Pontecorvo, queriendo disfrutar de que Marlon Brando formará a su manera, la malvada figura de 'Sir' William Walker, personaje real, no británico, mercenario norteamericano (como aparece mejor representado en el film "Walker" (1989) e interpretado por Ed Harris), el perseverante carácter fuerte del actor, Marlon Brando como de costumbre, inmiscuyéndose de las órdenes y el fijado guión, llevó a las diferencias entre director y él mismo, pero... como alguien dijo: 'Al ver la película, es evidente que Brando ganó por sus CLÁSICAS artimañas 'de mando', brillante y ligeramente, queda un poco vespertino y frívolo, por no decir que llama más la trama del argumento a la libertad sobre el racismo y los puntos enjuiciados del colonialismo a la rebelión, e igualmente de que por sí como es la propia película'... una crítica, enrevesada, a analizar.

La película es un retrato ingenioso, pero cínico en diseños coloniales y de podredumbre empobrecida, todo allí, es muy rudo y cómo quizá fuese, sin engañar, únicamente los diálogos en su doblez, pueden resultar algo chocantes, conjuntamente y en la media, postergados a la filosofía política ancestral es muy ortodoxa, dura y realista, que sin embargo, no hay alarde hollywoodiense.

De trasfondo intelectual, el colonialismo sale estigmatizado, los africanos esclavos aparecen idealizados y apocopados, algo reivindicativos en unos años de obertura racial de los AÑOS 60, los colonos representan el mando opresor y prepotente con sufrimiento en el control de los nativos negros, plasmando la situación en escenarios naturales, todo es una verdadera 'quemadura' referenciada tal como es su propio título, 'antirracista' funciona en revelar la intrínseca tramposidad inglesa en aquél colonialismo de los Siglos XVIII y XVII, enviando a un soldado provocador y pagado a fomentar una revuelta y así, de esta manera, quedarse con el territorio posteriormente, qué anecdóticamente en la película original eran los portugeses quienes dominaban la región por entonces, extendida de sus fronteras por 'El Nuevo Mundo', tras el descubrimiento de América por Cristobal Colón en 1492.


El efecto visual, el 'temple' de Marlon Brando alimenta una oportunidad al re-visionamiento, perdiendo todo su sentimiento de convicción por la crueldad de no escapar a los signos temporales de producción, pudiendo llegar hasta ser una experiencia fílmica algo tediosa.


Destacando su 'Banda Sonora' firmada por Ennio Morricone, el que ha podido volver hacer sonar dirigiendo una orquesta delante de audiencia en alguna ocasión.


Sinopsis:

Durante 1844, el Almirantazgo británico envía a 'Sir' William Walker (Brando), agente belicoso a (la ficticia) isla de Queimada, posesión portuguesa en las Antillas Menores, intentando la Gran Bretaña abrir la explotación de la empresa Antilles Royal Sugar Company. 

La tarea de Walker es organizar un sublevamiento de esclavos africanos contra el régimen portugués instaurado, pretendiendo reemplazarlos por un gobierno de colonos blancos a los que ellos flexibilizaban.


Llegando a Queimada, Walker se juntará con José Dolores, a quién tentará liderar una rebelión de los esclavos, induciendo a los principales terratenientes a rechazar el dominio portugués. 

Una vez que la rebelión del esclavo Dolores triunfa, Walker organizando el asesinato del gobernador portugués, se establecerá 'un régimen títere' en deuda con los intereses azucareros británicos, encabezado por el idealista, pero débil Teddy Sánchez, convenciendo Walker a Dolores de reconocer el nuevo gobierno entregando sus armas, a cambio de la abolición de la esclavitud, un distante dialogó hará el resto, sin quedar claro su futuro...

Después de haber tenido éxito en su misión, Walker regresará a Gran Bretaña con otras intenciones.


Ya en 1848, Dolores, disgustado por la colaboración del gobierno blanco en colaboración con los británicos, conducirá un segundo levantamiento, poniendo en peligro la compañía azucarera de las Antillas, provocando un levantamiento de seis años, habiendo que regresar Walker a Queimada, encargándose de suprimir la revuelta y pacificar la isla.

Los problemas comenzarán cuando, el presidente Sánchez no cooperando, será ejecutado en un golpe de estado diseñado por Walker, restableciendo un nuevo estado de las cosas totalmente deudor de la empresa británica. 

Las fuerzas británicas estando en la isla, guiados por Walker y capturando al rebelde Dolores, será castigado con la muerte, aún intentado Walker salvarle la vida, aunque todo será en vano.


La culpabilidad de Walker, en el momento de su marcha será innegable... las miradas de las gentes... viendo que en cualquier momento, de nuevo, la situación cambiará, de nuevo, hablará por sí sola...