CONVOY (1978).


Una de los 'Road-Movies' más encontrada en el encuadre de la ACCIÓN entretenida, camioneros y diálogos al uso, sin importancia, Sam Peckinpah consiguió su mayor éxito. Kris Kristofferson, Ernest Borgnine y Ali McGraw están en una película memorable.

El director reconocido en la ACCIÓN violenta Sam Peckimpah, después de sus cuatro películas anteriores, "Cross of Iron/La Cruz De Hierro" (1977), "The Killer Elite/Los Aristócratas Del Crimen" (1975), "Bring Me the Head of Alfredo Garcia/Traerme La Cabeza De Alfredo Garcia" (1974) y "Pat Garrett and Billy the Kid/Pat Garrett Y Billy, The Kid" (1973) con algunos problema en taquilla, se pudo revitalizar con este gran ROAD-MOVIE que en la moda de rodar los colosales camiones cisterna y transportistas, llegó a no tener un reproche `para llenar plateas, situando un tanteo de 12 por 45 millones de dólares, solo en EE.UU., al que se sumaría la llamada internacional. 


Entre la comunidad de un grupo de camioneros, rudos y engreidos comunicándose por radio de corto alcance por el desierto de Arizona, bromas y con su jerga de diferencias chulescas, la simpática afable se volverá en problemática tras un encuentro reuniendose los amigos sudorosos para la hora de alimentarse y descansar en estación de servicio, pero la llegada del jefe de policía de carretera, todavía más drástica y más prepotente, un fortuito encontronazo con el visitante y un hombre de color en la barra del bar, entrará en juego esos hombres curtidos en una pelea 'a totti-pleno' con unos y otros, resultando con la amenaza del Sheriff  'Dirty Lyle' Wallace amenazándolos que se marchen, a los que perseguirá, rápidamente...


De ellos, el 'Pato' (Kris Kristofferson), antiguo enemigo del mandamás policial al que extorsionaba con pagar por su paso territorial, conduciendo el culminante 'trucker' brillante de cabina doble, habiéndose discutido con una extraordinaria chica en un jaguar en carretera, excepcionalmente resarcido con unas cervezas en el bar, la recogerá subiendo y comenzando una huía a la carrera, junto con sus compañeros de asfalto.... sin embargo, el  ritmo acelerado, los comentarios jocosos contra el odioso mando con los coches de policía detrás conllevará al odio subliminal, siendo noticia por la zona, primero, con los habitantes de los pueblos posicionándose a su favor, y luego saliendo por t.v. declaraciones de injusticia a esos trabajadores que van de paso por sus desoladas calzadas ardientes, comenzando así, una encrucijada de unos tipos, quizá de mala fama, pero afables y amigables, expuestos como fuera de la ley y organizándose en común, las jugadas y estratagemas contra del intransigente jefe y sus ayudantes, los llamados a una 'rebelión', junto a todos los seguidores de la hazaña y persecución, vivirán unas horas difíciles, teniendo, al final, únicamente reivindicar su inocencia acusada de pésima contrariedad, que solo a contracorriente del reloj violentado, dará una solución a un desenlace imposible.


Los espectacular vehículos de gran cilindrada y caballos, junto a los desafiantes diálogos (genial doblaje en castellano en toda su especial tonalidad), la agresividad se respira, (criticando los bailes coreográficos de lucha en 'stop-motion' algo estridentes, aunque dejando pasarlos, la película funciona) involucrando al espectador del lado de los camioneros, cuando 'las pelis de polis y maleantes' triunfaron en aquellos AÑOS 70.


Todo y ello, gracias a otros filmes estrenados unos años antes como "White Line Fever/Infierno En La Carretera" (1975) o "Smokey And The Bandit/Los Caraduras" (1977) con Burt Reynolds, haciendo que "Convoy" (1978) de Sam Peckimpah, asegurando su acierto con el omnipresente Kris Kristofferson y su presencia ideal para papeles al uso, además de Ali McGraw, una de los atractivos rostros de primeros de los 70, contando especialmente con el gran Ernest Borgnine (con una interpretación parecida en "The Emperor Of The North/El Emperador Del Norte" (1975) y por aquel entonces, Burt Young, más conocido por ser el cuñado 'Polly' de la saga "Rocky", "Convoy" (1978), bien filmada y de original ramificación trepidante, pudo otorgar un honor de ser una de las películas emblemáticas de los AÑOS 70.