FRÍAMENTE... SIN MOTIVOS PERSONALES (1972).


Film de los más importantes para Charles Bronson de los AÑOS 70 en el género puro de la ACCIÓN en papel de 'asesino a suelto' que tendrá que solucionar un asunto personal. Dirigiendo Michael Winner, cumpliría lo esperado con secuencias diferentes, adaptadas de la época italiana del actor, ya recuperado para el mercado norteamericano, entre misteriosa e intrigante, fue un éxito. 

El actor Charles Bronson fue un actor secundario de los llamados 'de lujo' en los AÑOS 60, requerido para producciones europeas, concretamente para unas producciones italianas de tramas truculentas, sumamente originales, le causó darle fama y renombre por todo el mundo de la mano de Dino De Laurentiis, carismático y de fisonomía particular formaría una carrera imparable con tres y cuatro películas al año, volviendo de nuevo donde le vió nacer, brillaría con luz propia, casi todas de gran aceptación y en el rango medio de la ACCIÓN, le agregó un gran números de 'fans' desde los primeros AÑOS 70 hasta AÑOS 90.


Aquí, Charles Bronson se enfundaba en ser un 'sicario' de alto 'standing' que se le serían encargados trabajos muy complicados, resolviéndolos eficazmente y sin dejar rastro, apunto de retirarse, uno de sus últimos magnicidios le servirá en intentar limpiar su identidad de paso... aunque, el hijo presuntuoso de su 'jefe' pagador querrá identificarse con el oficio del frío asesino, este, enseñándole todo lo encomendado para serlo, el nuevo 'aprendiz' al desempeño de matar personas, comenzando, una sorpresa de conocer su crueldad traicionera, el arrepentimiento se volverá contra ese despiadado alumno que aspira aniquilar a su mentor.


El director Michael Winner, contaría con Charles Bronson para ser su actor 'fetiche' de aquí en adelante, fundando en poco tiempo el subgénero denominado: 'justicieros urbanos' con "Death Wish/El Justiciero De La Ciudad" (1975) y que ambos, se posicionaron en un lugar privilegiado en la ACCIÓN de la década de los AÑOS 70.


En cumpliendo de su función oscura de forma perfecta, muy mecánica y sin fallar, el personaje Arthur Bishop es conocido como 'El Mecánico' en el ámbito de las fatales enemistades fraticidas del crimen; de trama algo transitiva y estrambótica, 'expeditiva' en secuencias momentáneas con algo de atrapar al espectador, sin saber por qué, ganó su espacio, a pesar de 'no haberle sentado muy bien el paso del tiempo', merecidamente a la memoria de Charles Bronson, tan idolatrado como rehusado, obtuvo su 'remake' cogiendo al nuevo 'Héroe de ACCIÓN', Jason Statham con "The Mechanic" (2011), igualmente de aprobación popular.